¿Quiere el Ayuntamiento de Madrid periodistas domesticados ?
Parecía muy difícil que pudiese ocurrir, pero en la mañana del día de ayer – 31 de marzo – lo hemos comprobado y cabe hacerse la inquietante pregunta de que en el Ayuntamiento de Madrid, pueden existir personajes que busquen periodistas domesticados para que desarrollen su trabajo informativo con la amenaza de padecer la Ley Mordaza al participar en un rueda de prensa del Consistorio.
Ya nos habían comentado compañeros de profesión que observaban tics preocupantes en algunos componentes del nuevo equipo político que gobierna el Ayuntamiento de Madrid, sobre maltrato informativo a periodistas que cubren la información de la actividad política de la capital de España.
En todo caso ahora hemos comprobado que esto ocurre y que delante de nosotros se ha producido un hecho inadmisible que choca frontalmente con el artículo 20 de la Constitución que consagra y defiende la libertad de expresión y de información.
En una rueda de prensa que ha concedido la portavoz de este Ayuntamiento, Rita Maestre, una representante del Gabinete de Prensa, que ordenaba el turno de intervenciones de los periodistas, ha coaccionado, maltratado y presionado a una compañera de información, que estaba solicitando la opinión de la Portavoz Rita Maestre, utilizando palabras de esta, que claramente ponían en duda el trabajo y dignidad de la Portavoz, en su derecho constitucional de plantear una pregunta que podía interesar a los lectores del medio para el que trabaja, y que, como es lógico, no era del gusto de Rita Maestre.
Varias veces fue presionada e interrumpida la compañera periodista por la «ordenadora de la rueda de prensa», en un tono agresivo y prepotente, como si tuviese que defender a Rita Maestre de los comentarios hechos por la periodista en vez de limitarse a cumplir con su labor de coordinación..
Parece que solamente se admiten en estas ruedas de prensa adulaciones, parabienes y loas, a quienes forman el gobierno de la capital de España. Prueba de ello nos ocurrió hace unos meses, siendo la misma torpe «moderadora» la que nos intentó callar, al realizar una pregunta a Inés Sabanés en una rueda de prensa similar a la de ayer.
Es completamente inadmisible que la información que merecen los lectores, oyentes o televidentes, y al final, los ciudadanos madrileños, deba estar organizada por semejantes indocumentados o ignorantes de lo que es la libertad de expresión y de información.
El equipo de gobierno de Manuela Carmena quizás debería valorar los intentos de domesticación de periodistas que asisten a la Casa Consistorial, pero lo que deben evitar es que se marquen las fórmulas para que los periodistas pregunten según los intereses de los políticos. Si lo que se quiere y se busca en el quehacer diario de la información del Ayuntamiento de Madrid son periodistas ignorantes y atemorizados, que deben soportar presiones sobre su trabajo informativo deberían pensar que esto tiene un nombre : periodistas domesticados..
Pues con ser todo esto grave, prepárense quienes están leyendo este humilde Pregón, a lo que ha sido la guinda del pastel. Este periodista – que lleva 50 años de trabajo informativo en todo tipo de medios de comunicación – tomó la palabra en su turno de solicitud de información, y se atrevió a presentar una queja por el maltrato a que había sido sometida la compañera de trabajo, según se ha descrito.
Rita Maestre respondió con elegancia y claridad, sobre que a nadie se le presiona para llevar a cabo su labor informativa, pero no fue capaz de pedir perdón por lo ocurrido, cuando por asuntos más graves lo ha hecho, pero se supone que lo hará si estos comportamientos se repiten. No en vano es la Portavoz del Ayuntamiento de Madrid.
Pero tras lo comentado llegó la guinda anunciada. Y ocurrió que, dado que hemos estado solicitando en este Gabinete de Prensa una entrevista con Luis Cueto, mano derecha de la alcaldesa madrileña, y al no darnos respuesta a esta solicitud, me entretuve en conocer la situación de nuestra petición ya que – como viene siendo habitual – la peticiones de información que se hacen en este Ayuntamiento tienen retrasos inconcebibles.
Cuando este periodista iba a abandonar el edificio, se me dijo por parte de una trabajadora del acceso de seguridad del Ayuntamiento, que me limitase a asistir a la rueda de prensa.
Por todo ello, cabe preguntarse algunas cuestiones. ¿ Estuvimos siendo vigilados tras nuestra denuncia de lo ocurrido en la rueda de prensa ?. ¿ Existen cámaras de vigilancia en las zonas por donde se encuentran los periodistas que acuden al Ayuntamiento de Madrid con objeto de ser controlados ?. ¿ Puede considerarse que tratar de averiguar el estado de una información que no se nos facilita desde hace dos meses, es motivo de vigilancia y control ?. ¿ O se trata del inicio de una persecución o ajuste de cuentas por no haberse plegado a un inaceptable trato sobre la forma de denunciar un control de nuestros derechos constitucionales ?. Quizás más. ¿ Conoce estos métodos la Portavoz del Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ?. ¿ Los da por buenos o tiene algo que decir la responsable de la portavocía del Ayuntamiento de Madrid ?.
Se me ocurren muchas más preguntas, pero por el momento lo dejaremos en este punto y realizaremos nuestro trabajo informativo – si se nos permite porque todo puede pasar habiendo ya padecido muchas represalias por hechos como este – pero sirvan estas líneas para defender el trabajo de los periodistas, sea cual sea su medio de comunicación, y el derecho a la información, que se consagra en el artículo 20 de la Constitución. ?.